No me había fijado mucho en esta novela pero cuando leí que trataba sobre un pasado colectivo reciente, aquél que obligó a muchos españoles a emigrar para huir de la miseria y la pobreza, sentí mucha curiosidad. Hoy os traigo mis impresiones de "La maleta de Ana":
Nº de páginas: 344 págs.
Encuadernación: Tapa dura
Editorial: S.A. EDICIONES B
ISBN: 9788466663052
P.V.P 20.90€
Celia Santos (Bergara, 1972) reside en Barcelona. Durante siete años dirigió la sección de recomendaciones literarias en Tele Taxi TV, así como la web literaria Más que palabras. Tras cursar estudios de narrativa en el Ateneo de Barcelona, ha escrito numerosos relatos y cuentos, en su mayoría dirigidos a un público infantil y juvenil. La maleta de Ana es su primera novela para adultos.
Sinopsis:
En los años sesenta y setenta del siglo pasado, cientos de miles de mujeres españolas emigraron a Alemania para trabajar. Eran heroínas anónimas que se enfrentaban a un mundo nuevo y a menudo hostil solo para ayudar a sus familias.
Esta extraordinaria novela es la historia de una de ellas, pero podría ser la de todas.
La maleta de Ana es la historia dura pero emocionante de su protagonista, desde que sale de su pueblo de Ávila con una pequeña maleta de cartón para trabajar en una gran fábrica de Colonia. Es la historia de su juventud, sus dificultades, su complicidad con las otras obreras y su lucha contra las desigualdades sociales, pero también es el relato de su gran historia de amor.
Muchas décadas después de regresar de Alemania, Ana conoce a Cora, una mujer actual a quien decide contar su vivencia antes de que sea demasiado tarde. A través de los ojos y la sensibilidad contemporánea de Cora, iremos adentrándonos en la aventura de una joven valiente que fue capaz de tomar las riendas de su vida para salir adelante.
Mis Impresiones:
No me pude resistir a una historia sobre un pasado colectivo reciente: la emigración de muchos españoles durante la década de los 60 y 70 huyendo de la miseria y el hambre, una historia que se repite hoy en día por la falta de oportunidades, pero que entonces tuvo que ser mucho más duro, gente sin preparación, sin saber el idioma, sin las facilidades de las comunicaciones de hoy en día… Y este creo que ha sido mi problema con la novela, yo me esperaba una historia de desarraigo y no ha sido exactamente así. Os explico:
Tuve esa sensación al leer el primer capítulo: Ana sale de su pequeño pueblo de la provincia de Ávila con una vieja maleta de cuero de su padre con destino a la capital, de allí a Madrid, después Hendaya y finalmente Alemania, más de veinte horas de viaje para una joven de dieciocho años que nunca ha salido de su pequeño pueblo. Pero el hambre aprieta, es la única salida para la familia formada por sus padres, sus hermanos mellizos, su hermana pequeña y su abuela, un contrato de trabajo de operaria en una fábrica en Colonia que le permitirá enviar dinero a casa.
Un segundo hilo argumental situado en el presente nos presenta a Cora, ha conducido sin rumbo hasta llegar a Calarossa del Port, en la Costa Brava. Su mundo se ha derrumbado, se ha quedado sin trabajo y la vida tal y como la conocía parece esfumarse. No sabe qué hacer con su vida y decide pasar la noche en un bucólico hostal del pueblo. Allí, en el Hostal “La Tarangona” conocerá la historia de una anciana que le hará relativizar sus problemas…
Dos líneas argumentales narradas con un estilo sencillo y fluido pero con diferente peso en el grueso de la novela: es la historia de Ana la que tiene mayor protagonismo mientras que la de Cora, sirve para dar paso a la primera, a las narraciones de la anciana sobre la continuidad de su historia y quizás, una moraleja: relativizar los problemas. Pero a mí esta parte no me ha convencido, plantea una situación y presenta unos personajes que apenas desarrolla, en los que apenas profundiza, una historia floja que no me ha provocado ningún tipo de emoción, y además, creo que prescindible, no creo que la novela necesitara este hilo conductor puesto que iniciamos la lectura conociendo directamente a Ana y los inicios de su viaje.
En cuanto a la historia de Ana, es la historia de miles de españoles durante los 60 y 70, la historia de la emigración forzosa de miles de españoles para huir de la pobreza, un contrato de trabajo, una vida austera a miles de kilómetros, viviendo en barracones de la empresa o en pequeños pisos compartidos donde convivían varias familiar para poder mandar dinero a España o ahorrar todo lo posible para regresar y empezar de manera más digna, los inconvenientes del idioma, las asociaciones de compatriotas, las escuelas nocturnas, la unión entre inmigrantes… todo ello se refleja sutilmente en los inicios de la novela, pero se esfuma poco a poco para dar paso a una historia de lucha, de reivindicaciones laborales, de amor, traición y desgracias que a mí no me ha convencido.
En cuanto a los personajes, solo Ana o alguno de sus nuevos amigos de la fábrica, me han despertado alguna emoción, y en determinados circunstancias de la novela, pero aún así, pese a ser un personaje bien perfilado no me ha resultado un personaje creíble, la transformación de su carácter, de sus circunstancias personales no me han parecido muy reales, quizás porque conozco casos de personas que emigraron y sé que la realidad fue mucho más dura y su socialización no llegó hasta la siguiente generación. Creo que es porque yo esperaba encontrar una historia mucho más profunda sobre el desarraigo, más emotiva, por lo que la historia personal de Ana se me fue escapando según avanzaba en la lectura.
En definitiva, “La maleta de Ana” es una historia de ficción sobre la emigración colectiva de muchos españoles durante las décadas de los 60 y 70 a Alemania, una historia de lucha y coraje para conseguir una vida digna con una pequeña subtrama de amor, que nos deja el mensaje de relativizar los problemas actuales frente a los que tuvo la generación anterior. Una novela que no ha llegado a emocionarme como pensaba al esperar un poco más de desarraigo en la historia, pero que os aconsejo leer otras opiniones porque creo que puede convencer a otros lectores.
Mis Impresiones:
No me pude resistir a una historia sobre un pasado colectivo reciente: la emigración de muchos españoles durante la década de los 60 y 70 huyendo de la miseria y el hambre, una historia que se repite hoy en día por la falta de oportunidades, pero que entonces tuvo que ser mucho más duro, gente sin preparación, sin saber el idioma, sin las facilidades de las comunicaciones de hoy en día… Y este creo que ha sido mi problema con la novela, yo me esperaba una historia de desarraigo y no ha sido exactamente así. Os explico:
Tuve esa sensación al leer el primer capítulo: Ana sale de su pequeño pueblo de la provincia de Ávila con una vieja maleta de cuero de su padre con destino a la capital, de allí a Madrid, después Hendaya y finalmente Alemania, más de veinte horas de viaje para una joven de dieciocho años que nunca ha salido de su pequeño pueblo. Pero el hambre aprieta, es la única salida para la familia formada por sus padres, sus hermanos mellizos, su hermana pequeña y su abuela, un contrato de trabajo de operaria en una fábrica en Colonia que le permitirá enviar dinero a casa.
Un segundo hilo argumental situado en el presente nos presenta a Cora, ha conducido sin rumbo hasta llegar a Calarossa del Port, en la Costa Brava. Su mundo se ha derrumbado, se ha quedado sin trabajo y la vida tal y como la conocía parece esfumarse. No sabe qué hacer con su vida y decide pasar la noche en un bucólico hostal del pueblo. Allí, en el Hostal “La Tarangona” conocerá la historia de una anciana que le hará relativizar sus problemas…
Dos líneas argumentales narradas con un estilo sencillo y fluido pero con diferente peso en el grueso de la novela: es la historia de Ana la que tiene mayor protagonismo mientras que la de Cora, sirve para dar paso a la primera, a las narraciones de la anciana sobre la continuidad de su historia y quizás, una moraleja: relativizar los problemas. Pero a mí esta parte no me ha convencido, plantea una situación y presenta unos personajes que apenas desarrolla, en los que apenas profundiza, una historia floja que no me ha provocado ningún tipo de emoción, y además, creo que prescindible, no creo que la novela necesitara este hilo conductor puesto que iniciamos la lectura conociendo directamente a Ana y los inicios de su viaje.
En cuanto a la historia de Ana, es la historia de miles de españoles durante los 60 y 70, la historia de la emigración forzosa de miles de españoles para huir de la pobreza, un contrato de trabajo, una vida austera a miles de kilómetros, viviendo en barracones de la empresa o en pequeños pisos compartidos donde convivían varias familiar para poder mandar dinero a España o ahorrar todo lo posible para regresar y empezar de manera más digna, los inconvenientes del idioma, las asociaciones de compatriotas, las escuelas nocturnas, la unión entre inmigrantes… todo ello se refleja sutilmente en los inicios de la novela, pero se esfuma poco a poco para dar paso a una historia de lucha, de reivindicaciones laborales, de amor, traición y desgracias que a mí no me ha convencido.
En cuanto a los personajes, solo Ana o alguno de sus nuevos amigos de la fábrica, me han despertado alguna emoción, y en determinados circunstancias de la novela, pero aún así, pese a ser un personaje bien perfilado no me ha resultado un personaje creíble, la transformación de su carácter, de sus circunstancias personales no me han parecido muy reales, quizás porque conozco casos de personas que emigraron y sé que la realidad fue mucho más dura y su socialización no llegó hasta la siguiente generación. Creo que es porque yo esperaba encontrar una historia mucho más profunda sobre el desarraigo, más emotiva, por lo que la historia personal de Ana se me fue escapando según avanzaba en la lectura.
En definitiva, “La maleta de Ana” es una historia de ficción sobre la emigración colectiva de muchos españoles durante las décadas de los 60 y 70 a Alemania, una historia de lucha y coraje para conseguir una vida digna con una pequeña subtrama de amor, que nos deja el mensaje de relativizar los problemas actuales frente a los que tuvo la generación anterior. Una novela que no ha llegado a emocionarme como pensaba al esperar un poco más de desarraigo en la historia, pero que os aconsejo leer otras opiniones porque creo que puede convencer a otros lectores.
Ay... he leído tus conclusiones finales... Me preocupa que no te haya llegado a emocionar totalmente. Yo la leeré muy pronto. A ver qué tal se me da a mí. Besos
ResponderEliminar¡Buenos días guapa!
ResponderEliminarCuando vi esta novela no me animé porque tenía muy poco tiempo para leer y muchas lecturas acumuladas; a decir verdad, tampoco el tema llamó mucho mi atención en ese momento, no me apetecía una lectura de este tipo. Después de leerte no me arrepiento de mi decisión, solemos coincidir en gustos y estoy casi segura de que, de haberla leído, tampoco habría sido lo que yo esperaba.
Un beso
La tengo esperando, a ver que es lo que me parece a mi. Besos.
ResponderEliminarHola carinyet! yo lo he dicho anteriormente por ahí, pero mis padres, sobre todo mi padre, se ha pasado la vida fuera de España trabajando, y estás historias me tocan la fibra sensible 😯
ResponderEliminarMe lo llevo.
Buena reseña.
Besukis 💋💋💋
Cuántas novelas que a priori deberían ser interesantes por el tema que tratan se quedan en casi nada por no llegar a profundizar y por carecer de la capacidad de emocionar. Yo creo que es una incapacidad de los autores para transmitir sentimientos que hace que las novelas resulten frías y planas. En fin, no sé si será este el caso, pero me he encontrado muchas novelas así y es una pena.
ResponderEliminarPues no me llamaba mucho la atención y después de leerte menos. A mí esto que comentas me pasa en casi todos los libros con dos hilos temporales: el del presente siempre lo veo de relleno o mucho más flojo en comparación con el del pasado.
ResponderEliminarNada, creo que no me animo.
¡Besote!
Es un tema interesante que me atrae porque mis abuelos lo vivieron y tuvieron que irse a Alemania, pero creo que no me animaré...que se aleje un poco del tema y le falte emoción me frena mucho guapa ;)
ResponderEliminarBesitos
La verdad es qeu no me llama nada la novela, y menos después de leerte.
ResponderEliminarBesos
No es la primera reseña que leo que incide en lo mismo, en la falta de emoción. Aunque el argumento me atrae, no creo que la lea.
ResponderEliminarBesotes!!!
¡vaya! La cogí porque me resultaba atractivo el tema y ahora me dejas un poco chafada. A ver cuándo la lea...
ResponderEliminarBesos
No me atrae mucho este tipo de libros, así que lo dejo pasar. Besos
ResponderEliminarNo se si me animaré, la verdad es que tengo mucho pendiente y en algún momento hay que parar de acumular
ResponderEliminarBesos
No creo que me anime, no me llama nada la atención
ResponderEliminarHola!cuanta diveraidad en los comentarios....Tu reseña igualmente la deja con. Ointeresante.gracias por traerla.saludosbuhos
ResponderEliminarA mí me ha gustado el tema de la inmigración pero también me ha faltado emoción o intensidad.
ResponderEliminarHola. Anoto el título ya que me gustan este tipo de historias. Además no conozco a la escritora.
ResponderEliminarBesos.
Este lo deje pasar en su momento y después de leerte tampoco me animo.
ResponderEliminarBesos